sábado, 5 de marzo de 2011

Cuidado Pastoral de las Vocaciones 2011 Provincia de la Santísima Trinidad -Chile

Estimados Hermanos, quiero dar algunas sugerencias para trabajar este año en CPV:

Este año la pastoral vocacional cuenta con seis aspirantes que deben discernir su posible ingreso al Postulantado. Estos son:

-Felipe (21), un joven de Jufra que realiza su discernimiento en la fraternidad de Alameda.

-Wilfredo (27), de Copiapó, aspirante del año pasado que prolongó su proceso.

-Marcelo (30), de Quirihue, lo acompaña la fraternidad de Chillán.

-Raimond de la Cisterna, aún no se ha presentado oficialmente.

-Patricio (17), de Cauquenes, acompañado de la fraternidad de Parral.

-Cristóbal (17), de Algarrobo, acompañado por el Totoral.

Hay que orar mucho por su discernimiento y decisión, su próxima jornada será en el Eremitorio El Totoral los días 8-9-10 de abril a cargo de los Hnos. Claudio e Isauro.

En marzo cada zona debe preparar una jornada para todos los jóvenes que quieran conocer más de cerca nuestra vida y vocación franciscana. Si no hay jóvenes en nuestras comunidades, es necesario salir a encontrarlos a colegios y universidades, con la ayuda de profesores de religión, orientadores y encargados de pastoral. Lo más probable que en estos lugares estén necesitados de algún tipo de asistencia o capellanía, lo que implica mayor entrega de parte nuestra al mundo de los jóvenes, lo que quita tiempo y no siempre es remunerado, pero es la única forma de llegar a ellos y poder invitarlos a conocer nuestra vida y el carisma franciscano. Debemos atrevernos a enfrentar la realidad juvenil tal como es en la actualidad y motivarlos a seguir al Señor con la esperanza de que Cristo los llamará y transformará.

Una vez teniendo algunos jóvenes interesados, comienza el acompañamiento, a través de retiros, jornadas, participación eclesial, en la liturgia, la oración y la pastoral. Pero más especialmente a través del diálogo personal y la dirección espiritual. Esto también requiere tiempo, compromiso y dedicación, cierto conocimiento de la persona humana y los procesos de maduración humana y espiritual, ayudado por fichas, cuestionarios, y material de trabajo personal. Pero lo principal es tener el tiempo para escuchar, acoger, aconsejar y provocar procesos de conversión, y seguirlos a lo largo del tiempo. Hacer esto es una gran falencia en muchos de nosotros, no sirve de nada convocar jóvenes si no les vamos a ofrecer este tipo de ayuda.

Algunos dirán que este trabajo le corresponde al encargado solamente, pero no es así, todos estamos llamados a promover nuestra vocación en el mundo de los jóvenes, todos podemos tener algún tipo de llegada, en la pastoral, en los sacramentos, en la homilía, en el apostolado y en cada familia que conocemos. También podemos acompañarlos en su crecimiento cristiano y vocacional, y sólo cuando el joven esté más maduro para su discernimiento, corresponde derivarlo al encargado vocacional de la fraternidad. Este profundizará la tarea, pero todos pueden ayudarle y dar su opinión. Finalmente, para ser presentado, se necesita la aprobación de la mayor parte de la fraternidad, en especial del guardián. En algunos casos, cuando la fraternidad es deficiente en su acompañamiento, la responsabilidad la asume el equipo zonal.

Podrán decir que no hay nada nuevo, que todo esto lo sabemos, pero lo recuerdo porque en la práctica no lo realizamos, no vamos donde los jóvenes, nos cuesta ponernos de acuerdo para hacer jornadas, nos cuesta aceptarlos como son, y poco nos dedicamos para acompañarlos. Y no es un problema de material, de creatividad, de carisma o de edad, sino un problema de compromiso, servicio, testimonio, comunicación y trabajo de la fraternidad local. Esforcémonos este último año para convocar jóvenes, prepararlos y presentarlos a la nueva fraternidad que se conforme el próximo año, si Dios quiere, y con voluntad decidida para trabajar fuertemente la pastoral juvenil y vocacional.

Les recuerdo además que tendremos un encuentro nacional de Acólitos, como se les había prometido antes de terminar este período. Este será en san Francisco de Mostazal los días 13, 14 y 15 de mayo. La edad estaba puesta sobre los 14 años, pero varios hermanos me han dicho que tienen pocos de esa edad, más bien de 12 y 13 años. Podemos aceptar esa edad si ustedes ven que tienen madurez suficiente para participar. Respecto a los papás que los acompañan, ojalá sean pocos, pues la vez anterior llegaron cerca de 20 y hubo también que atenderlos. Deben costearse el pasaje y dejar un aporte para la casa de retiro (pueden más menos $5000 por persona).

Por último, invitarlos a hacer mucha oración por nosotros, nuestro trabajo, y cada joven que acompañamos, pues sólo por la oración podemos ser instrumentos del llamado de Cristo a los jóvenes de hoy. Para esto queremos elaborar un material que nos ayude a orar especialmente en el mes de agosto, nuestro mes vocacional. Esperamos este trabajo de parte de los hermanos del equipo y el compromiso de todos a dedicarle un tiempo en nuestra meditación personal y fraterna.

A los animadores de CPV les recuerdo que nuestra reunión será el Lunes 1 de Agosto, así que por ahora sólo organizarse a nivel local y zonal, y recomenzar el trabajo.

Muchas Bendiciones a cada uno, que tengan un buen año pastoral y un enriquecedor tiempo de cuaresma.

Hno. Adrián Arancibia, Animador de CPV.

Vocación Franciscana