

Los hermanos que acompañaron en esta experiencia fueron Claudio Pumarino, Ricardo Vásquez , Cristián Eichin y Adrián Arancibia. Los hermanos de la fraternidad de Angol se preocuparon de recibirnos, llevarnos a los lugares, aportar una caja de alimentos para cada lugar, un colchón inflable y material bíblico para trabajar con las comunidades.

De esta misión participaron los tres nuevos postulantes: Cristofer, Alexis y Monier. Cuatro Aspirantes: Cristián de Parral, Juan José de Temuco, Sebastián de Santiago y Cristian de La Serena. Y cuatro jóvenes con inquietudes: Javier de Valparaíso, Fabián de Punta Arenas, Cristóbal de Algarrobo y Patricio de Cauquenes. En total fueron 11 jóvenes que se distribuyeron con 4 hermanos, lo que permitió llegar a 9 comunidades ubicadas en la cordillera de Nahuelbuta, como Coyanco, Lomas del Toro, El Maqui, Pichipehuen, La Fontana, Quebrada Honda, Angol y Puente las Animas.

En estos lugares había que caminar mucho, a veces uno se perdía en los bosques, como les pasó a dos hermanos que caminaron todo el día hasta llegar a otra comunidad de misioneros. En algunas comunidades les tocó cocinarse, dormir en el suelo de la capilla, bañarse en el río, etc… Esto favoreció el diálogo, la oración, la pobreza y la faternidad. Algunos tuvieron sus dificultades, pero quedaron entusiasmados y contentos de la experiencia vivida, que nos permitió revitalizar nuestro compromiso para comenzar un buen año en la pastoral vocacional. Agradecemos enormemente a los hermanos de Angol que permitieron esta misión, en especial al Hno. Pedro y don Juan Covili. Si Dios quiere nos volvemos a encontrar en otra misión.

Hno Adrián Arancibia, Animador CPV.